viernes, octubre 22

El Feng Shui y el dormitorio infantil

El cuarto infantil también puede decorarse siguiendo las reglas del Feng Shui.
En este artículo hablaremos de los colores, los muebles y de lo que se debe y lo que no se debe poner en un cuarto destinado a los niños.

Las reglas básicas:

- La zona de estudio debe estar separada del lugar de juego y descanso, si ambos ambientes se encuentran en la misma habitación recurre a elementos que diferencien los espacios, como el color de las paredes, un biombo o una estantería que delimite cada área. 
- Mejor que elijas colores suaves para la pintura, por ejemplo el azul cielo proporciona calma y aumenta la concentración. También está demostrado que los niños aumentan su rendimiento en un entorno con variedad de colores por lo tanto evita los colores neutros (blanco, negro, gris) y los marrones. Una vez finalizado el momento de estudio deben disponer de espacio para guardar todo lo relacionado con este.
- Las ventanas juegan un papel muy importante según el Feng Shui, en el caso de los niños una antigua regla dice: “ventanas grandes en la casa hacen niños indisciplinados”, volviendo a la zona de estudio se recomienda que no estén sentados frente a una ventana muy grande o de espalda a una puerta.
- Referente a la iluminación es ideal que la habitación infantil esté orientada hacia el Este, la dirección del elemento Madera y del crecimiento, si esto no es posible, utiliza un sol como elemento decorativo. La luz artificial debe estar presente mínimo en dos fuentes, una luz general y otra menos intensa, los apliques de pared que proporcionen una luz de tonalidad rosa propiciarán un ambiente tranquilizador para el momento de dormir.

Colores:

El cuarto de los niños es el lugar de la casa en donde suele encontrarse mayor colorido. Sin embargo, no todos los colores son apropiados para todas las situaciones y edades.
- Amarillo: Es excelente para llevar alegría a un ambiente y compensa la falta de luz natural en ambientes oscuros. Pero no es un bueno para el cuarto de los bebés, pues lloran más en habitaciones amarillas
- Blanco: Irradia pureza y pulcritud, pero también puede evocar frialdad. No es apropiado para el cuarto de los niños pequeños.
- Verde: Como mencionamos, evoca crecimiento y creatividad, pero en ciertos casos puede asociarse con inmadurez e inestabilidad. Es apropiado para el cuarto de niños pequeños si tienen buena luz natural, pero no para los adolescentes o si la habitación es muy oscura.
 - Púrpura: Expresa exclusividad y autoridad, y puede ser adecuado para la habitación de un adolescente. Debe evitarse en las habitaciones y espacios de juego (como un play-room) de niños más pequeños.
- Negro: Debe evitarse en todos los casos.
- Colores naturales: madera, habano, crudo, maíz, beige, etc. Transmiten tranquilidad y quietud, por lo que pueden ser adecuados para niños muy excitables. Cuando se presentan en exceso y sin otros toques de color pueden resultar aburridos y conspirar contra la creatividad 

Muebles:

Se sugieren los muebles bajitos de madera que no dificulten los movimientos, sobre todo por la noche. Las camas altas no son recomendables para los niños pequeños, pues les pueden inducir miedo y la sensación de un abismo en la oscuridad.
Es recomendable colocar una luz de seguridad en algún enchufe de la recámara, con el objeto de darles seguridad en las noches. Utilizar tapices y cuadros alegres con motivos de animalitos o niños o payasos promoverán una atmósfera de convivencia y sociabilidad.
Hay que evitar colocar la cama de los niños junto a enchufes y aparatos eléctricos para no provocarles ansiedad e inquietud al niño, y también sacar la televisión y reemplazarla juguetes didácticos o rompecabezas. En el peor de los casos, si es inevitable en la habitación, se sugiere colocarla en un mueble que tenga puertas que se cierren en la noche, tal como lo sugerimos para la habitación de los adultos.
Otro aspecto importante en una habitación infantil es el evitar muebles, libreros o estantes que queden sobre la cabeza del niño al dormir o estudiar ya que esto le provocará encierro que se reflejará en bloqueos y limitaciones para expresarse y convivir con los demás así como rebeldía provocada por no descansar plena y libremente.
En almohadones y textiles lo más recomendable son aquellos de algodón o lino para permitir un libre flujo de la energía corporal del niño así como para promover frescura y creatividad.
En lo que respecta a las telas, deben ser de fibras naturales, ya sea vegetales como algodón y lino o animales como lana o seda. Promoverán seguridad, libertad, frescura y limpieza en sus sensaciones.


1 comentario:

  1. Anónimo22 octubre

    Muchas gracias, Mireia. Lo estaba esperando como agua de mayo, jejeje. Me lo leeré con detenimiento, a ver si puedo seguir estas reglas. Gracias por este blog tan chulo. Se encuentran muchas ideas y, además, ideas prácticas, no de esas de "revista de decoración" imposibles para los hogares normalitos como el mío. Ya me gustaría a mí tener una de esas casas que salen en "¿Quién vive ahí?", así que me conformo con mi pisito y tus grandes ideas.

    Yawanawa

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