A petición de
Grace, abrimos una entrada para adentrarnos en el estilo rústico.
El estilo rústico colonial
Es un estilo muy conocido y usado; en él predomina la madera, la piedra, el barro, el hierro forjado y los textiles. Este ambiente es el apropiado si queremos dar sensación de comodidad, simplicidad y tranquilidad.
El mobiliario
Es de alta calidad, sus maderas son tropicales fuertes y muy resistentes. Ejemplos de ello son el wengué, la teca, el iroco y la jabota. Se le puede dar algún acabado para hacerlos destacar.
Si, por ejemplo, queremos decorar un dormitorio le daremos mucha importancia a los muebles, aunque la pieza que resaltará más será la cama. Las camas con dosel combinan a la perfección con el estilo colonial, además de las estructuras de cama en hierro forjado.
Los textiles
Para los textiles usaremos tejidos naturales (como el tejido de saco o el yute). En cuanto a las cortinas tenemos dos opciones: permitir la entrada de luz con telas livianas o usar telas estampadas y gruesas para augmentar la sensación de rusticidad.
Los colores
El color por excelencia de los aires coloniales es el blanco, la familia cromática del beige y los marrones del mobiliario macizo. Aún así podemos dar toques de color con violeta, turquesa, lila o malva, aunque es sus variedades más frías.
Los suelos
En el estilo rústico colonial no podemos dejar desnudos los suelos. Es importante vestirlos con alfombras
de esterilla o con tupidos flecos, así nuestra habitación tendrá otra imagen.
Los adornos
Los rincones ornamentados con alguna pieza de exterior son muy valorados, ya que ahora cobrará protagonismo flanqueada por cuatro paredes.
Podemos usar las butacas del jardín, una jaula de mimbre o incluso una hamaca que hará las delicias de tus ratos dedicados a la lectura.
Sabemos que lo que verdaderamente imprime personalidad en la decoración del hogar son los complementos y accesorios.Dentro del estilo colonial, lo natural se impone y va más allá de los tejidos y el mobiliario.
Ejemplos de detalles a utilizar: un cuenco de fibra lleno de semillas coloreadas y hojas secas encima de la mesa, un jarrón de mimbre con tallos de bambú, retratos en sepia, un ventilador de astas de madera y rafia, un baúl grande e imponente a los pies de la cama, un biombo, unas celosías a modo de contraventanas...
El estilo rústico mexicano
Como cualquier otro estilo decorativo, el mexicano tiene sus propias características.
El mobiliario
Los muebles están hechos de maderas pesadas, como las pequeñas mesitas de talla rústica. En su ausencia, podemos pintar nuestras sillas plegables de amarillo y azul brillantes. También podemos usar muebles de hierro forjado.
Los textiles
Los que combinan mejor con este estilo son los tejidos rústicos de fibras naturales (manteles de algodón o sillas de cuerda tejida). Podemos usar el típico serape (chal mexicano de colores brillantes) a modo de esterilla e incluso de tapiz de pared.
Para los cojines mejor usar telas a rayas con colores primarios.
Los colores
El color que predomina es el amarillo (es brillante, alegre y acogedor).
Para acentuarlo, podemos usar el azul brillante o turquesa vivo. Además podemos usar tonos terracota, rojo, naranja y rosa brillante.
Los suelos
Como ya hemos comentado, podemos usar un serape a modo de esterilla.
Los adornos
Podemos complementar nuestro espacio con candelabros de hierro forjado o piezas de reja.
Si queremos aportar nuestro "toque animal", usaremos figuras de peces y aves (en especial el gallo y los loros). Serán más adecuadas si están hechas de arcilla o barro.
Para las plantas, mejor usar las de flores rojas y plantas verdes de hoja ancha (como la yuca).
Algunas fotografías:
Estilo colonial
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Cama de hierro forjado |
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Sillas de ratán |
Estilo mexicano